Objetivo común: cero emisiones

La temperatura en Europa ha aumentado 1,1ºC en relación a los niveles preindustriales, lo que convierte al período 2012-2021 en la década más cálida registrada, según la Agencia Europea de Medio Ambiente. Y una cifra aún más preocupante: el calentamiento global inducido por la actividad humana crece a un ritmo vertiginoso de 0,2ºC por década.

El impacto que genera el aumento de la temperatura ha sido más que demostrado por la ciencia identificando las consecuencias directas sobre el cambio climático: aumento de la sequía, aumento de la temperatura de los océanos, cambios en las estaciones, pérdida de ecosistemas… La mayor causa de este calentamiento global es la cantidad de gases de efecto invernadero que se están concentrando en la atmósfera. Gases como el CO2 generado por la quema de combustibles fósiles; el metano y el óxido nitroso procedentes de la agricultura, silvicultura y pesca intensiva; o los hidrofluorocarburos procedentes en mayor medida por las actividades realizadas por los comercios, en concreto, el uso intensivo de frigoríficos, congeladores, aire acondicionado, bombas de calor…

Por esta realidad y con la visión en asegurar un futuro para el planeta y la sociedad, los signatarios de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) se comprometieron en el Acuerdo de París de 2015 a trabajar para conseguir limitar el aumento de la temperatura mundial por debajo de 1,5ºC respecto a los niveles preindustriales de aquí a 2050. De hecho, para conseguir esta reducción en el crecimiento de la temperatura las emisiones deben reducirse en un 45% para 2030 y llegar a cero en 2050.

Las medidas para llegar a un mundo con emisiones netas cero es uno de los mayores retos a los que se ha enfrentado la humanidad según las Naciones Unidas. Es necesaria una transformación de nuestra forma de producir, consumir y movernos para conseguirlo. Más de 70 países, entre los que se encuentran los que más contaminan como China, Estados Unidos y los integrantes de la Unión Europea, han fijado este objetivo de alcanzar las emisiones netas cero. Y las empresas también están poniendo de su parte. Más de 3.000 compañías e instituciones financieras colaboran con la iniciativa Science Based Target (SBTi) con una estrategia contra el cambio climático basada en la ciencia para reducir sus emisiones. Cellnex forma parte de esta iniciativa desde 2019 y es el gran desafío que tiene como grupo para los próximos años. “Hemos puesto en marcha acciones específicas de reducción de emisiones que incluyen un Plan de Transición energética, basado en principios de Energía 4.0, compra y autogeneración de energía renovable y acciones de eficiencia energética”, comenta Josep Lluís Guiu, responsable global de Sostenibilidad en Cellnex.

Este año la compañía también ha aprobado la hoja de ruta para alcanzar el Net-Zero en 2050: reduciendo las emisiones directas e indirectas de gases de efecto invernadero; neutralizando las emisiones inevitables mediante proyectos de absorción para eliminar el carbono de la atmósfera; y como paso previo a la neutralización, compensando las emisiones residuales financiando proyectos de compensación. Con estas medidas, “Cellnex se asegura de que el avance es incuestionable”, añade Guiu.

“Cellnex se ha marcado como objetivo ser un grupo líder en la lucha contra el cambio climático logrando la neutralidad en carbono, mejorando la resiliencia de las infraestructuras y fomentando una economía circular en línea con nuestra actividad”, comenta Guiu. Y como hitos entremedios, la compañía se ha marcado 2025 para que todo su suministro sea de electricidad de fuentes renovables; y se compromete a reducir en un 70% en 2030 los alcances 1, 2 y 3.3 de la huella de carbono, para llegar a ser carbono neutral en 2035. Además, también tiene en marcha otros proyectos que ayudarán a la consecución del objetivo Net-Zero: evaluación del impacto en la biodiversidad con enfoque en capital natural, cálculo de la huella del agua, promoción de la economía circular, o la transición a flotas de vehículos híbridos o eléctricos.